El calendario del mercado de criptomonedas está marcado por patrones estacionales, y uno de los más notorios y menos deseados por los inversores es la debilidad de Bitcoin en el mes de septiembre. Un análisis de los últimos 10 años muestra que, estadísticamente, septiembre es el mes con el peor desempeño para la criptomoneda líder.
Durante la última década, septiembre ha registrado una rentabilidad promedio del -2.8%, convirtiéndolo en el mes más débil para BTC. Además, las estadísticas son contundentes: solo el 39% de los meses de septiembre han cerrado con un rendimiento positivo.
¿Por qué la debilidad de septiembre?
Aunque no hay una sola razón definitiva para este patrón, la estacionalidad sugiere que la presión de venta tiende a aumentar a principios de otoño. Los inversores a menudo se preparan para el final del año, lo que puede llevar a una toma de ganancias o una reorientación de carteras.
Si bien agosto también suele ser un mes de rendimientos negativos para Bitcoin, su debilidad es menos severa en comparación con septiembre. Sin embargo, este período de presión suele ser seguido por un repunte hacia finales de año, un fenómeno que los inversores esperan con ansias.
El patrón es un recordatorio de que la peor racha del año para Bitcoin ha llegado. Para los inversores, esto puede ser una señal para ser cautelosos, o para aquellos con una visión a largo plazo, una oportunidad para acumular antes de las posibles subidas de fin de año.